Una vez llegamos, lo primero que hicimos fue dejar las cosas en el hotel, el "Windflower en Mysore". Aquí mi gran alegría al encontrarme semejante SPA que ni de coña me puedo permitir en Europa...Comimos en el hotel, por 5 euros y tratándonos como señores...Lo mejor de todo es que la cerveza costaba casi tanto como la comida y te la mostraban como si fuera el mejor champán francés. Eso es algo impresionante de la India, cosas tan normales para mí como el agua Evian (francesa, un poco mala de sabor para mi gusto si la comparas con el agua del grifo aquí en Suecia) y te la venden como si fuera impresionante...Me recuerda ese pasaje de "La pasión India" en el que el rey importa y consume únicamente ese agua.
Pues bien, no sé si lo he mostrado, pero os pongo un vídeo de mi habitación, la cual me costó 30 euros la noche con desayuno incluído...Impresionante.
Luego nos fuimos a ver el palacio de Mysore, que es la atracción más sublime de la ciudad y que realmente merece la pena ver. El problema es que estás un poco hasta las narices con eso de que te engañen por todo si eres europeo: que si "págame y te guardo los zapatos", que si la entrada vale 100 veces más por ser europeo (literalmente 100 veces, aun así un precio irrisorio), que si te persiguen los vendedores ambulantes...Es un poco como acoso.
Lo más gracioso fue que Niklas, uno de mis suecos intentó ser más listo que los indios y se puso a hacer fotos dentro del palacio. Por supuesto, estaba prohibido hacerlas y por supuesto que le pillaron. Se lo llevaron a un cuartucho y allí les soltó un euro y le dejaron marchar. Los sobornos son algo bastante natural en la India, parece. De todas maneras yo no sé si me hubiera arriesgado a hacerlo, imagínate que te quitan el pasaporte y tal...No sé....Y encima le hicieron borrar las fotos de la cámara.
De todas maneras, el palacio es precioso. Aquí tengo alguna instantánea:
Luego nos fuimos a ver el zoológico de la ciudad, construido en 1892 (uno de los zoos más antiguos de todo el mundo). Es básicamente como cualquier zoo, sólo que con menos vegetación debido a las temperaturas y con más indios. Lo mejor fue que vi mi primer tigre de bengala blanco. Era precioso!
Aquí lo podéis ver subido a una rama todo pancho y preocupado.
Nota: Mis suecos la volvieron a preparar en el zoo, porque los indios iban sin zapatos y cogieron y se quedaron descalzos por el zoo, pisando cacas de mono y tal. A mí se me reían por "hacer de europea" y quedarme con mis zapatillas...Ni que contar que fui la única que se encontraba bien al día siguiente! :-)
Al día siguiente nos fuimos a ver el templo de Chamundeshwari, que es uno de los más antiguos en India (siglo 12). Se encuentra a lo alto de una montaña, en la que hay que subir 1000 peldaños de escalera. Los indios encima suben los 1000 peldaños poniendo flores y encendiendo velas, con lo que les puede costar un rato enorme subir, como podréis entender. Nosotros subimos en coche y bajamos por las escaleras de piedra (yo casi me mato dos veces) y mientras bajábamos nos íbamos encontrando a toda la gente rezando y poniendo flores y velas en las escaleras, que casi daba cosa pisarlo de lo bonito que era.
Aquí os pongo una fotico del templo molón:
A la bajada nos encontramos con la patruya de limpieza India, que básicamente son las juventudes del ejército limpiando la basura (latas, bolsas, etc) que la gente ha ido tirando por el camino...Un poco cochinetes, la verdad por este país.
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